Generales

Un perro salva la vida de un bebé al avisar a su dueña de que se estaba atragantando: “Es inteligente y especial”

Violeta Ţică, una policía de 41 años en la Inspección del Condado de Prahova, vivió una experiencia que ni ella misma podría haber imaginado, pero que fue posible gracias a una serie de coin...

Violeta Ţică, una policía de 41 años en la Inspección del Condado de Prahova, vivió una experiencia que ni ella misma podría haber imaginado, pero que fue posible gracias a una serie de coincidencias y a la conexión especial que tiene con su perro, Nero. Todo comenzó en la noche del lunes 6 de octubre, cuando la vida de un bebé de un mes estaba en peligro debido a un accidente doméstico. El bebé se había atragantado con jarabe y dejó de respirar, causando pánico en sus padres, quienes, desesperados, salieron a las escaleras del edificio buscando ayuda.

El instinto de Nero, el perro de Violeta, jugó un papel crucial en este rescate. “Mi perro comenzó a ladrar de una forma extraña, muy fuerte y agitado, como nunca antes”, relata la policía. “Era como si quisiera anunciarme algo, transmitir algo importante. En ese momento supe que algo grave estaba pasando”. Fue el comportamiento inusual de Nero lo que alertó a Violeta, quien inmediatamente decidió salir de su apartamento, descalza y en pijama, y dirigirse al lugar de los hechos.

Al llegar al pasillo del edificio, Violeta vio a la madre del bebé, que en un estado de desesperación, le entregó al pequeño, diciendo: “Por favor, sálvame, sálvame, ya no respira”. Era evidente que la situación era crítica.

“Fue un momento eterno”

Con una calma admirable, Violeta, que había recibido recientemente un curso de primeros auxilios organizado por la policía, comenzó a aplicar las maniobras de reanimación en el bebé. “Tuve la oportunidad de tomar un curso de primeros auxilios en la Inspección de Policía del Condado de Prahova, hace apenas dos meses”, cuenta Violeta. “Durante ese curso, yo misma pregunté cómo salvar a un bebé si se ahoga. No sé por qué, ya que tengo un hijo de 18 años, pero fui la única en preguntar sobre eso”. Esa decisión de plantear esa inquietud en el curso se convirtió en una cuestión de vida o muerte para el bebé.

Con la calma de quien sabe lo que está haciendo, Violeta colocó al bebé boca abajo sobre su antebrazo derecho, con la cabeza ligeramente inclinada, y comenzó a golpearlo suavemente en la espalda, exactamente como lo había aprendido en el curso. “En un momento, apoyé la cabeza sobre mis rodillas para que pudiera toser, y eso fue lo que pasó”, recuerda. “Los segundos parecían horas. Fue un momento eterno, pero sabía que tenía que recuperar al bebé. No quería ni imaginar que no lo lograría”.

La tensión en el ambiente era palpable. Incluso su hija, que bajó al ver a su madre ausente por tanto tiempo, preguntó con temor: “¿Mami, se murió?”. Violeta le respondió con firmeza: “¡No, mami, no! ¡No se ha muerto, ya se recuperará!”. Tras unos segundos que parecieron interminables, el bebé comenzó a reaccionar. “Sentí la saliva tibia en mi mano y oí un leve gemido. Fue en ese momento cuando supe que estaba funcionando. El bebé empezó a respirar, y luego, comenzó a llorar”, relata Violeta emocionada. “Cuando empezó a llorar, le dije a los padres: ‘¡Se acabó! ¡Se ha recuperado! ¡No se asusten más!’. Fue un alivio indescriptible”.

El camino interminable al hospital

Sin embargo, la pesadilla no terminó ahí. Aunque el bebé había recuperado la respiración, aún quedaba mucho por hacer. La ambulancia del SMURD, al llegar, se hizo cargo del niño, pero en la policlínica de Mizil no había médico de guardia. Solo las enfermeras recomendaron que lo trasladaran al hospital pediátrico en Ploiești. “También fui a buscar la ambulancia, porque el padre no tenía coche”, recuerda Violeta. “Conduje hasta Ploiești en pijama y zapatillas, porque quería asegurarme de que el bebé estuviera bien. Afortunadamente, tras tres días de hospitalización, el niño se recuperó completamente”.

De alguna manera, todo parece haber sido parte de un destino. La combinación de su formación en primeros auxilios, su conexión con Nero, y el hecho de que los padres del bebé se mudaran al mismo edificio en el que ella vive, contribuyó a salvar una vida esa noche en Mizil. “Me siento muy agradecida de haber estado allí para ayudar”, concluye Violeta. “Si no fuera por todas esas coincidencias, el bebé no habría sobrevivido hasta que llegara la ambulancia”.

Fuente: https://www.infobae.com/espana/2025/10/18/un-perro-salva-la-vida-de-un-bebe-al-avisar-a-su-duena-de-que-se-estaba-atragantando-es-inteligente-y-especial/

Volver arriba